El coaching es una de las disciplinas de desarrollo personal más importantes de la actualidad. No en balde, dentro de sus múltiples beneficios, se encuentra el de ayudar a las personas a desarrollarse en distintos ámbitos para alcanzar el éxito.
Esto la convierte en una disciplina con alta demanda de formación. Sin embargo, muchas personas desconocen dónde y cómo estudiar para ser coaching, o qué aspectos se deben tomar en cuenta para elegir una escuela de coaching.
De manera que, ante la pregunta de ¿Qué debo estudiar para ser coaching? ¿Por dónde empezar? ¿Qué tipo de coaching elegir? Hay que tener en cuenta los siguientes aspectos:
¿Qué vamos a ver?
¿Qué debo estudiar para ser coaching?
Así como sucede con otras disciplinas, para ser coach se requiere de una formación previa, profunda y especializada. En lo absoluto se trata de algo que se aprende empíricamente o solo a través de cursos cortos.
Partiendo de este punto, el coaching se aprende estudiando programas de coaching profesional. En ellos, se profundiza la metodología del coaching y sus múltiples aplicaciones.
Algunas de estas aplicaciones abarcan la inteligencia emocional, inteligencia transpersonal, así como también, aspectos de relaciones sistémicas, comunicación intrapersonal y desarrollo de habilidades, entre otros.
Otro punto importante que responde a la pregunta “qué debo estudiar para ser coaching” es informarse previamente antes de iniciar estudios de coaching. En ese sentido, se recomienda investigar a profesionales que ya se dediquen a este sector para que compartan sus experiencias y visiones.
También, recibir sesiones de coaching que permitan descubrir de primera mano, de qué trata el coaching y los distintos beneficios que ofrece.
¿Qué otros tipos de estudios debe hacer una persona para ser coaching? Como ya lo hemos mencionado, comenzar con una formación integral en coaching profesional. Pero luego, se puede continuar con talleres de desarrollo personal, cursos de introducción al coaching o programas de entrenamiento en coaching.
Por otro lado, si alguien desea especializarse en una o varias ramas del coaching, puede obtener un título acreditado de acuerdo al tipo de coaching que se desea desarrollar.
Es decir, se debe comenzar por una formación general e integral en coaching, y luego profundizar en un programa específico, por ejemplo, programa de educación para ser coach empresarial, coach personal o coach deportivo.
De esta forma, se ofrece un servicio profesional de coaching con un valor adicional al resto de la competencia. El motivo, es que se pueden abarcar distintos tipos de coaching y con esto, tener un amplio espectro laboral en este sector.
¿Dónde puedo estudiar para ser coaching?
Existen numerosos programas de formación profesional para ejercer el coaching. Sin embargo, se recomiendan aquellas escuelas de coaching que estén avaladas por la International Coaching Federation (ICF).
También se recomiendan cursos que cuenten con la acreditación de la Asociación Española de Coaching (ASESCO).
Estas titulaciones profesionales, avaladas por dichas instituciones, proporcionan la certificación necesaria para formarse y ejercer profesionalmente la carrera de coach.
Es sumamente importante tomar en cuenta estas recomendaciones antes de elegir una escuela de formación en coaching. Ciertamente, puede tratarse de una tarea un poco difícil, si se toma en cuenta la gran cantidad de escuelas y cursos que existen en el mercado sobre coaching.
No obstante, si cuentan con los requisitos antes mencionados, se garantiza una certificación profesional y completa.
Entonces, a modo de resumen ¿qué aspectos se deben tomar en cuenta antes de elegir dónde estudiar para ser coaching?
- Que brinde titulación para acreditar el ejercicio profesional.
- Que tenga programas de prácticas profesionales (pasantías) para desarrollar el conocimiento aprendido. De esta forma, se puede ser coach de otros y al mismo tiempo, recibir coaching de profesores y de otros alumnos.
- Que permita la posibilidad de aprender haciendo. Es decir, que no todo sea teoría, sino que el pensum comprenda asignaturas y prácticas de campo.
¿Qué debo tener en cuenta para aprender a ser coaching?
En general, para ser coach se debe contar con una serie de habilidades personales fundamentales para poder desarrollar con éxito esta profesión. Claro está, también intervienen otro tipo de habilidades, sin embargo, las de índole personal son las que tienen mayor peso.
Estas habilidades incluyen aspectos de crecimiento personal, valores, sistema de creencias, capacidad para resolver conflictos, desarrollo de liderazgo y autoconocimiento, entre muchas otras.
Ahora bien, si una persona desea formarse como coach profesional, también debe tener en cuenta el desarrollo de otro tipo de competencias. Algunas de ellas son:
Desarrollo de psicología lingüística positiva
Parte del éxito en una sesión de coaching radica en el lenguaje que se usa para impartir el conocimiento. Por eso, el desarrollo de un lenguaje positivo y constructivo es fundamental y forma parte de la base para impartir el coaching eficazmente.
Altruismo por ayudar a otras personas
Si hay algo que debe tener un coach, es la capacidad altruista de ayudar a otros. Para nada el coaching es inflar el ego propio y ejercer autoridad al coachee, al contrario, es un trabajo colaborativo que implica ayudar a otros desinteresadamente.
Pasión
Para ser coach hay que verdaderamente tener vocación. El coaching no es una carrera que se estudia si no hay otras opciones. Es decir, no está diseñado para aquellas personas que desconocen sus gustos o no saben qué desean estudiar.
El coaching es una profesión que se debe estudiar porque en verdad se cuenta con la disposición necesaria para ejercerla y dejar una huella en la vida de otras personas.
Para finalizar, es importante resaltar que el coaching es una profesión que permite crecer al propio coach, al tiempo que ayuda a crecer a otros.
Por ese motivo, ante la pregunta de “qué debo estudiar para ser coaching”, se recomienda partir de esta premisa, y luego, identificar si realmente la carrera de coaching es la ideal para elegir como profesión.
