Indudablemente, los emprendedores enfrentan numerosos retos en su camino y un gran cúmulo de vivencias.
Como resultado, experimentan muchas emociones que pueden restarle la energía necesaria para triunfar con su negocio.
Una de estas emociones es la frustración. La frustración del emprendedor es prácticamente el peor enemigo de los emprendimientos. Entre otras cosas, afecta negativamente tanto al emprendedor como a su entorno y es capaz de producir depresión, ansiedad y un sinfín de afecciones psicológicas nocivas.
Por consiguiente, se hace necesario desarrollar la habilidad de saber manejar episodios de frustración para alcanzar los objetivos y hacer crecer al negocio.
A continuación, te brindaremos algunos consejos para lograrlo.
¿Qué vamos a ver?
¿Por qué fracasan los emprendedores?
¿Qué causa la frustración del emprendedor? Principalmente el fracaso de la empresa. Este tipo de situaciones son capaces de producir tanta frustración a los emprendedores a tal punto de convertirse en el obstáculo más relevante que deben enfrentar.
Partiendo de este punto, ¿cuáles serían las causas por las que un emprendedor fracasa? Generalmente por:
1- Ausencia de un plan de negocios
Si un emprendedor no tiene un plan de negocios que respalde su idea y su emprendimiento, difícilmente tendrá éxito.
Este plan de negocios debe estudiar al mercado, analizar la política de precios, costos, gastos, la rentabilidad, la posibilidad de financiamiento, la inversión necesaria y, sobre todo, debe ayudar al negocio para pueda comenzar sus operaciones eficientemente.
2- Perder mucho tiempo elaborando el producto o servicio y la estrategia
Muchos emprendedores se enfocan demasiado en diseñar a la “perfección”, el producto o servicio que piensan ofrecer en sus negocios, y se olvidan del resto de operaciones que también son importantes.
Lo fundamental es dar el primer paso. Inmediatamente, las circunstancias van indicando los pasos a seguir para ir perfeccionando, ajustado o cambiando cualquier aspecto en el camino.
De igual forma sucede con la estrategia. En este caso, no hay que demorarse mucho pensando, simplemente estar enfocados en los objetivos que se desean lograr y las ideas y acciones van surgiendo poco a poco.
En efecto, si se tiene muy claras cada una de las metas, diseñar la estrategia será una de las cosas más sencillas de hacer.
En líneas generales, el tiempo es algo muy preciado e importante cuando de emprendimientos se trata. El motivo, es que, si un emprendedor tarda mucho en iniciar su propio negocio, podría dar paso a que alguien más implemente dicha idea y ocupe el nicho que ya había trabajado.
3- Falta de adaptación
Los mercados actuales y los clientes, son muy dinámicos y cambiantes.
Por ende, si un emprendedor no es capaz de adaptarse, quedará rezagado con su empresa y dará paso a que la competencia triunfe.
4- Ausencia de compromiso
Ser emprendedor es asumir el compromiso, dedicación, constancia y trabajo de hacer todo lo que esté al alcance para cumplir con las metas y triunfar en el competitivo mundo del emprendimiento.
Si no hay compromiso por parte del emprendedor en tomar decisiones difíciles, hacer diversos sacrificios y no dedicarle el tiempo merecido a su negocio, tendrá un fracaso inminente en su emprendimiento.
5- Alcanzar el éxito muy temprano o demasiado tarde
Los emprendimientos que alcanzan su punto máximo muy temprano o demasiado tarde, pierden la curva de aprendizaje correcta que lleva al éxito. Esta es, ideación, incubación y ejecución.
Cuando los negocios crecen excesivamente rápidos sin contar con un plan estratégico realista y sostenido, terminan por fracasar gracias a su propio éxito vertiginoso. Por otro lado, aquellos que demoran demasiado en crecer eficazmente, también son altamente vulnerables al fracaso.
Por todo esto, lo más recomendable es hacer un plan de negocios que permita iniciar las operaciones etapa por etapa, pasando por la ideación, incubación y ejecución y evitar caer en los extremos demasiado rápidos o muy tardíos.
Cómo vencer la frustración del emprendedor en 5 pasos
Existen 5 pasos prácticos que ayudarán a vencer la frustración del emprendedor:
1- Reconocer la frustración
Tal como sucede con todas las emociones, la frustración, debe ser aceptada. Huir de ella, es dar pie a que siga invadiendo en la mente del emprendedor y termine por desencadenar más tristeza y decepción.
Al contrario, reconocer y aceptar la frustración permitirá trabajarla para darle solución y de esta forma, permitir que no sea un obstáculo más a la hora de tomar mejores decisiones.
2- Confiar en el potencial
Todo emprendedor debe eliminar sus propias barreras mentales.
¿Cómo hacerlo? Teniendo confianza en sí mismos, en sus talentos y en el potencial que poseen como dueños de un emprendimiento.
Lo más recomendable es reconocer siempre las propias habilidades para cultivarlas y que puedan ayudar a superar cualquier sentimiento de frustración o decepción.
3- Reconocer las limitaciones
La intención es ser lo más optimistas posible, pero también, ser realistas.
Luego de que el emprendedor sea capaz de reconocer sus propias habilidades, es fundamental, que conozca hasta dónde puede llegar y cuáles son sus oportunidades de mejora.
4- Aprender de los errores
Cada uno de los fracasos del negocio debe representar una oportunidad de aprendizaje para el emprendedor.
En lugar de ver cada error como un motivo para ceder a la tristeza, y una pared que impide avanzar, se debe trabajar con proactividad y buscar soluciones efectivas que ayuden a salir de la frustración.
5- Colocar la situación en perspectiva
Ante cualquier frustración, lo mejor es respirar, ver la situación con cabeza fría y analizar los pro y contras. De hecho, algo que muchos emprendedores exitosos hacen es pedir apoyo de asesores, quienes son capaces de ver elementos que el propio emprendedor no puede ver.
Como resultado, pueden encontrar soluciones efectivas sin ceder mucho a la frustración y a los sentimientos que esta causa.
Ejercicios para aumentar la tolerancia a la frustración si eres emprendedor
La lámpara de Aladino
El emprendedor debe imaginar que tiene la lámpara de Aladino en sus manos y la frota. Luego de imaginar al genio saliendo de la misma, se puede entablar una conversación en donde se cambia el pensamiento negativo de la frustración y, además, ayuda al desahogo.
La lista
Se trata de que el emprendedor al final del día, haga una lista de todas las cosas que le han pasado durante el día. Tanto buenas como malas, la intención es que pueda identificar que no todo ha sido malo y que esas cosas buenas del día, valen más que la propia frustración.
Preguntas Frecuentes
¿Cuáles son las frustraciones de un emprendedor?
Las frustraciones de un emprendedor pueden originarse en diferentes áreas del negocio, tales como el fracaso en alcanzar metas, la dificultad en adaptarse a cambios del mercado, o el enfrentar obstáculos imprevistos.
La falta de planificación, la pérdida de tiempo en elaboración y la ausencia de compromiso son también factores que pueden causar una inmensa frustración en el camino emprendedor.
¿Cómo evitar la frustración en el emprendimiento?
Para evitar la frustración en el emprendimiento, es esencial reconocer la emoción, confiar en el propio potencial, reconocer las limitaciones, aprender de los errores y colocar la situación en perspectiva.
Implementar ejercicios como La lámpara de Aladino y La lista también pueden ayudar a aumentar la tolerancia a la frustración y contribuir al bienestar emocional.
¿Qué dificultades puede tener un emprendedor?
Un emprendedor puede enfrentar diversas dificultades, incluyendo la ausencia de un plan de negocios sólido, la pérdida de tiempo en la elaboración del producto, la falta de adaptación a cambios dinámicos del mercado, y la ausencia de compromiso y dedicación.
Además, el alcanzar el éxito muy temprano o demasiado tarde puede convertirse en una dificultad insospechada.
¿Qué factores pueden ocasionar el fracaso de un emprendedor?
- Ausencia de un plan de negocios: Falta de dirección y análisis del mercado.
- Perder mucho tiempo: En la elaboración del producto o en diseñar la estrategia perfecta.
- Falta de adaptación: No ajustarse a las necesidades cambiantes del mercado y clientes.
- Ausencia de compromiso: Falta de dedicación y trabajo arduo.
- Alcanzar el éxito muy temprano o demasiado tarde: Crece sin un plan estratégico realista o demora demasiado en crecer.
En definitiva, es menester que la frustración del emprendedor sea vista como una oportunidad para aumentar las posibilidades de éxito y no como una piedra más en el camino.
De esta forma, se libera el peso que tiene la frustración y se amplía la mente y el pensamiento. ¿El resultado? Se pueden ver este tipo de situaciones como un empuje para triunfar en el mundo del emprendimiento.